La ambición rompe el saco,
le decía un viejo Duende,
a una señora, que regaba sus flores,
ésta miró de un lado a otro,
pero al no ver a nadie ,siguió regando,
entonces el Duende, le empezó a hablar.
Las personas, no necesitan notoriedad,
porque cada una es especial,
y distinta a las demás.
La mujer dejó de regar,
y como si hablara sola,
empezó a preguntar:
-es malo desear? tener un poco más?
no, le contestó el Duende,
pero si ese poco más,lo deseas,
para poder rebasar a alguien,
no es malo es malísimo!!
porque eso dice de ti,
que tu misma no te valoras,
y en consecuencia ,
tampoco a los demás.
La mujer quedó perpleja,
porque lo que ella ambicionaba,
era ser superior,a una persona,
de la que ni siquiera sabía,
como era su cara,
cuando el Duende, la dejó pensar,le dijo:
y para terminar, hagas lo que hagas por ser más,
solo conseguirás,
que algún día,
te conozcan de verdad,
y jamás, tendrás amigas.
FANTASIA
Me encanta. No sólo tiene un día. Un día que podemos tomar decisiones para el futuro, pero la eternidad es el segundo, un latido de corazón de la eternidad
ResponderEliminaren amor y luz
Cyn
Hola Cindy,perdona que te responda a destiempo,es cierto,la eternidad es un momento,un latido del corazón,no más.
ResponderEliminarGracias...en Paz y Amor