MARIA SU HISTORIA 7ª Y ÚLTIMA PARTE..

A la mañana siguiente Maria y Mirian,
están desayunando y Pedro sin pedir permiso,
se sienta,con la mirada puesta en Maria.
Ésta extrañada de una reacción como esa, pregunta:
--Que pasa Pedro!!le ha ocurrido algo al crío!
--no, no, me ocurre a mi.
Mirian sabía que Pedro se iba a declarar a Maria
y aunque le hubiera encantado estar delante,
sabía que Maria necesitaba esa intimidad,
que gusta cuando te hablan de Amor.

Y disculpándose se retiró,
Maria no podía quitar sus ojos de los de Pedro,
haciendo que los sentimientos de ambos,
pasaran de un corazón a otro,
formando ese deseo que provoca la pasión.

Pedro le explicó a Maria toda su vida y en ella iba incluida,
ese sentimiento que por ella sentía,siendo éste el mismo,
que aún sentía por su esposa.

Maria le contesta que no le importa ese sentimiento hacia su esposa,
que hasta lo veía honesto y comprensible.
Pedro se levanta de esa preciosa y elegante silla y,
besa apasionadamente a Maria,
ésta cree estar en el Cielo,oh!,cuanto había echado en falta,
esa pasión y ese Amor.
Pedro siente que está besando a su esposa,porque Maria besaba igual que ella.

En ese momento entra Beatriz en el saloncito y lo que ve,
la llena de una alegría descontrolada,haciendo que baya en busca de Josué,
cuando éste baja y ve la escena,se alegra tanto por su padre!!
que se olvida de su madre,pero Beatriz le explica que Maria,
y la madre de ambos son la misma persona.

Josué no puede contener sus lagrimas y Beatriz se lo lleva a su habitación.
saliendo Beatriz y Josué, entra José,
Maria y Pedro seguían abrazados como dos chiquillos y José,
se pone celoso,Maria que lo ve y conoce esa mirada,
lo invita a desayunar con ellos.
Padro le dice que Maria y el se aman, y José,
le echa en cara que por segunda vez,
le quita a la mujer que ama.

Josué que vio como su tío entraba en el saloncito,
para desayunar,baja corriendo y se encuentra,
aquello que él pensó,solo que ésta vez,
sería él quien lo parara.

Cuando Maria ve a Josué su corazón le dice,
que algo iba a pasar, y no se equivocaba,
Pedro al ver a su hijo un tanto enfadado,
 se pone delante de él,
pero éste echa a su padre hacia un lado,
y se sienta junto a José:
--Tío ya te dije que no volverías hacer mas daño a mi padre,
y hoy cumplo esa promesa al decirte que te alejes de nosotros,
que no te queremos a nuestro lado.

Adela que lo a escuchado todo,
llora y José que la ve,
la utiliza diciendo a Pedro que se va,
pero que se lleva a su hija con él.
Pedro empieza a reír y Adela también,
porque ella sabia,
que si su padre reía era porque ella estaba a salvo.

Maria observaba a Pedro y éste le dice a su hermano,tú renunciaste a tu hija en el momento que nació y,si su madre que en paz descanse,
no me llama y me explica la situación,
jamás hubiera sabido que tenia una sobrina!!
esa que hoy es mi hija!!

Josué se dio cuenta que ésta vez nada nublaría ese Amor,que jamás decreció entre sus padres,
en un momento la mesa que ocupaba Pedro y Maria,se llenó de hijos,porque Maria quería a Adela como a una hija más,de hecho le encantaba la idea de tener tres hijas contando a su nuera y,a dos hijos contando a su yerno. 
Y, como el regalo mas preciado,sus nietos,
un niño que veía mas allá, y, 
una niña que no era menos que el niño.

Pero a Maria le quedaba la prueba mas difícil,
decir a su esposo que ella era Isabel, su esposa.
Pero ese detalle lo deja para la cena,
pues no solo a su esposo debía una explicación,
también sus hijos se la merecían.

Cuando Maria sube a su habitación,
Mirian le dice que le explique,
Maria le cuenta cada detalle y Mirian sabe que aún le quedaba,la última prueba, 
de la que saldría airosa,
pues conociendo a Pedro no habría problemas.

En se preciso instante llaman a la puerta,
es Pedro,que pidiendo permiso a Mirian besa a Maria,tan apasionadamente que Mirian recuerda a su marido.

--Quedamos para cenar tu y yo solos? 
propone Pedro,
--Otro día,porque ésta noche deseo cenar con toda tu familia,esa que considero mía.
Pedro lo entiende y así se hace.

Cuando están todos en la mesa ,
incluyendo a Mirian,
Maria se disculpa y le pide a Beatriz y a Mirian que la acompañen a su habitación,
pues se le había olvidado un pequeño detalle,
que tenía como regalo para toda la familia.

Pedro se siente mal porque él no había comprado nada a Maria.
Ya en su habitación delante del espejo,
Maria se quita las lentillas,
dejando ver unos grandes ojos azules como el cielo.

Mirian se emociona al sentir que Maria la había puesto,al mismo nivel que a su familia,
Beatriz que no pensaba volver a ver esos ojos,
llora desconsoladamente,Maria la abraza con tanto Amor,que Beatriz se siente una niña pequeña.

Cuando las tres mujeres bajan de nuevo al salón,
Pedro se levanta para ceder el paso a Maria,
pero cuando ésta le mira para darle las gracias,
Pedro se queda atónito,cuando ve esos preciosos ojos azules.

Fue entonces que se echó a llorar como un niño,
Maria lo besaba sin parar pidiendo con cada beso,su perdón,
perdón que Pedro le concedía con cada beso y abrazo,que su esposa con tanto Amor le daba.

El Metre del Hotel Palas que había seguido la historia,mandó traer una botella del mejor cava,para celebrar una de las mejores historias de Amor,
jamás vivida en ese emblemático y lujoso Hotel.

Quien me conoce sabe que no se escribir,
si no existe realidad para poder revestirla de fantasía, pero debo decirles que en ésta historia,
la fantasía brilla por su ausencia.
Porque hasta el Hotel es autentico y, 
el Metre también.
La pareja y su familia viven una vida,
como la de todos, 
con sus pros y contras.
De José nada se supo, 
y su dolencia cardíaca,
pasó a ser nada,
con una intervención quirúrgica
practicada al poco de marchar Maria.


FANTASIA