PERO LO HE VISTO IDEAL PARA,
UNA AMIGA QUE PIENSA,
QUE TENER ALGUNAS GRIETAS,
ES MOTIVO DE VERGÜENZA.
Un aguador de la India tenía sólo dos grandes vasijas que colgaba en los extremos de un palo y que llevaba sobre los hombros. Una tenía varias grietas por las que se escapaba el agua, de modo que al final de camino sólo conservaba la mitad, mientras que la otra era perfecta y mantenía intacto su contenido. Esto sucedía diariamente. La vasija sin grietas estaba muy orgullosa de sus logros pues se sabía idónea para los fines para los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba avergonzada de su propia imperfección y de no poder cumplir correctamente su cometido. Así que al cabo de dos años le dijo al aguador:-Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir por tu trabajo. El aguador le contestó: -Cuando regresemos Así lo hizo la tinaja y, en efecto, vio muchísimas flores hermosas a lo largo de la vereda; pero siguió sintiéndose apenada porque al final sólo guardaba dentro de sí la mitad del agua del principio. El aguador le dijo entonces:-¿Te diste cuenta de que las flores sólo crecen en tu lado del camino? Quise sacar el lado positivo de tus grietas y sembré semillas de flores. Todos los días las has regado y durante dos años yo he podido recogerlas. Si no fueras exactamente como eres, con tu capacidad y tus limitaciones, no hubiera sido posible crear esa belleza. Todos somos vasijas agrietadas por alguna parte, pero siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados. Cuento anónimo. FANTASIA |
Hola Teresa, es una historia preciosa. No hay que avergonzarse por perder combustible, lo que importa es lo que hay en nuestro interior, por eso seremos medido. Lo último que debe hacer un ser humano es menospreciarse. Un beso para ti y para tu amiga.
ResponderEliminarHola Universo,eso mismo le digo yo,porque tiene la gran suerte de que lo que hay en su interior es tan hermoso que le sale al exterior.
EliminarEs muy afortunada aunque ella no lo quiera ver.
Gracias.Un beso.
Una historia verdaderamente preciosa, y aunque ya la conocía me gusto recordarla. Gracias por compartirla.Bss
ResponderEliminarGracias a ti,por comentar una historia que pertenece a una de mis grandes amigas.
EliminarBesos.
Linda a mensagem...concordo em absoluto!
ResponderEliminarMaria
Gracias Maria. en realidad todos somos vasijas con alguna que otra grieta.
EliminarBesos.
Teresa