EL AMOR JAMÁS SE RINDE...

Solo la música daba cobijo,

a ese malestar que en el corazón sentía el Hada,

Pues la hacia divagar por esos parajes de la Magia,
por donde se sentía tan segura,como pájaro fuera de la jaula.

Con cada partitura que ésta componía,el corazón del Hada volaba mas allá,
de los confines de una Tierra,en cuyo firmamento las Estrellas
bailaban para si misma.

Donde el Sol era esposo de la Luna,
y donde el Amor, era dueño y señor,
de todo y todos.

Solo al terminar de componer,
el Hada volvía a ese lugar,
donde no le gustaba estar.

Donde las Estrellas no sabían bailar,
y el Sol quemaba tanto,
que no podría abrazar a la Luna,jamás.


Donde al Amor se le restringía el paso,
en mas de un corazón.

Quedando así un mundo tan vacío,
que de no ser porque el Amor,
jamás se rinde,no se podría vivir en él.

FANTASIA